La política se ha convertido en una actividad económica más, y eso no está bien. Para el World Party, la política es una actividad de bien social, ejercida por personas que dedican su tiempo a mejorar el bienestar y el progreso de los ciudadanos.
Los políticos deben trabajar para servir a la sociedad, no para servirse a sí mismos.
El salario de los políticos debe estar al nivel del sector privado, pero no tienen porqué gozar de prerrogativas económicas adicionales. La política es una actividad generosa, en la que la mayor recompensa es la dignidad, la satisfacción personal y el reconocimiento público. Los políticos no deben hacerse ricos o vivir por encima del nivel de la sociedad a la que representan durante sus mandatos. Un buen político, nunca tendrá problemas económicos o laborales en el sector privado cuando deje de representar a su país.
Los políticos indecentes constituyen un gran riesgo para su país. Su responsabilidad es tan grande que no deben jamás estar protegidos de la aplicación de la ley (aforamiento). Al contrario: debe aplicarse un código penal más estricto para los políticos corruptos debido a la gran responsabilidad social que tienen.